NEVUS (LUNARES)
¿Qué es?
Los nevus (lunares) melanocíticos son proliferaciones (tumores) benignos de melanocitos, que son las células de la piel responsables de la pigmentación.
Se pueden clasificar según varios criterios
a) Según la edad de aparición
- Los nevus congénitos son los que están presentes al nacimiento o durante el primer año de vida. Se encuentran en 1% de los recien nacidos.
- Los nevus adquiridos son los que aparecen a lo largo de la vida. La mayoría de los nevus aparecen sobre los 7-8 años y en torno a los 18-20. No obstante hoy día sabemos que pueden aparecer en cualquier momento de la vida.
- Nevus junturales o de la union. Los melanocitos se situan en la union entre la dermis y la epidermis, es decir, más superficiales. Son planos, apenas sin relieves, normalmente de coloracion parda o marrón.
- Nevus dérmicos o intradérmicos. Son aquellos en que los melanocitos se localizan mas profundo, a nivel de la epidermis. Normalmente con relieve, "verrucosos", aunque suelen comenzar siendo planos y con el tiempo cogen relieve. A menudo sin color.
- Nevus compuestos: Se sitúan a ambos niveles: en la union dermoepidermica y a nivel de dermis.
- Pequeños: son los más frecuentes y miden menos de 1,5 cm de diámetro.
- Medianos: miden entre 1,5-20 cm de diámetro.
- Gigantes: más de 20 cm de diámetro.
Síntomas
El aspecto, como hemos comentado anteriormente, puede ser muy variado, desde ser aplanados, verrucoso, de color muy oscuro, no tener color, etc
Normalmente son asintomáticos, pero en ocasiones puede picar o sangrar, lo que constiruye un signo de alarma. Deben controlarse sus cambios con la regla de ABCDE y en caso de duda, consultar siempre con su dermatólogo.
En ocasiones, la piel de alrededor de un lunar pierde el color, llevando incluso a desaparecer el lunar que rodea. Es lo que se denomina halonevus o nevus de Shutton. No tiene ninguna importancia, aunque se ha asociado al vitíligo.
Tratamiento
En principio, el principal objetivo del tratamiento de un lunar es evitar que se convierta en un melanoma. Por tanto, nevus que tengamos la seguridad de que son benignos y no tienen signos de alarma no tienen necesidad de ser tratados. Sin embargo los pacientes quieren quitarse lunares, bien porque les moleste al roce, bien porque le resulten inestéticos. En estos casos siempre hay que valorar la cicatriz, ver el historial de intervenciones y su resultado previo, localizacion, etc
La técnica más empleada es la cirugía, bien la extirpación y sutura directa o bien la extirpación tangencial (Afeitado). En la primera llegamos hasta capas profundas de la piel y es necesario dar puntos. En la segunda, quitamos la parte del lunar que sobresale, mediante un corte a ras de piel. Al evitar dar puntos, es una técnica con mejores resultados estéticos, sobre todo en zonas de mala cicatrización como la espalda o el abdomen.
En algunos centros tratan lunares con láser, pero realmente en este caso los resultados suelen ser iguales o peores a la extirpacion tangencial pues al fin y al cabo hay que producir la misma destruccion, con el riesgo de producir daño más abajo en la dermis.
Otras técnicas como la crioterapia con nitrógeno líquido no son adecuadas para el tratameinto de nevus (aunque si para otras lesiones como fibromas o queratosis seborreicas)